Páginas

miércoles, 23 de febrero de 2011

A FONDO: Made in Italy

La globalización es una realidad, ¿para qué negarlo? Consumir moda actualmente es consumir confecciones de cualquier parte del mundo. ¿Quién no se ha encontrado en una etiqueta un made in Bangladesh, o un made in Taiwan, un made in China, o un made in Korea?
El made in China, un sello cada vez más generalizado
Aunque eso sí, los made in 'nacionales' son cada vez más difíciles de encontrar. En este sentido, ¿es positiva la globalización en el mundo de la moda? Parece que el continente asiático se está haciendo con toda la producción y confección mundial... aunque no seamos pesimistas, todavía nos quedan, por ejemplo, algunos made in Italy como los de antes, los de toda la vida, que nos obligan a resistirnos a la evidencia de que la moda es, al igual que otras muchas disciplinas, un concepto globalizado.

Portada del mítico disco de los 80 Made in Spain de Miguel Bosé 
Nos remontamos a la época del boom de la moda italiana, nos situamos en los años 70 y 80, el momento de diseñadores y firmas de moda de la talla de Armani, Versace, Valentino, Moschino, Gucci, Missoni, Dolce&Gabanna... Fueron años en que el mundo de la moda centró su mirada exclusiva en la pasarela de Milán, ciudad entonces designada como la cumbre del savoir faire del sector. Todos los focos se centraban en la pasarela italiana y era, sin duda, quien marcaba el ritmo de la moda a nivel mundial. 
Gianni Versace, creador del imperio que heredó su hermana Donatella tras su asesinato en 1997
Desde entonces la moda ha ido evolucionando, emergieron nuevas pasarelas (Nueva York, Londres, Madrid...) que empezaron a desviar el foco exclusivo de Milán. Y hasta ahora... donde nos encontramos en un momento en que, como comentábamos al principio, el gigante asiático parece que se ha hecho con el sector y desaparecen las piezas auténticas de confección exclusiva y artesanal del principio. 
FOTO glamour.com: modelos de Marc Jacobs en la pasada edición de la NY Fashion Week
Pero eso sólo es una parte de la realidad. Hoy en día, la globalización también nos ha enseñado a valorar más lo propio, lo auténtico, lo que se hacía como antes, lo original y exclusivo. De esta manera, el made in Italy, por ejemplo, está hoy en día más cotizado que nunca. Ante tanta globalización, ¿quién no suspira por un made in Italy como los de antes? 
FOTO Gucci: Lady Di en los años 90, un prototipo de mujer made in Italy
De todos modos, globalización al margen, hay un tema que particularmente nos intriga del made in Italia y es el cambio generacional. En el año 1997 y tras la fatídica muerte de Gianni Versace, el imperio del modista quedó en manos de su hermana, quien durante estos años ha sufrido por mantener la herencia al nivel exigido. ¿Y qué pasará con diseñadores como Giorgio Armani? 
Armani con la actriz Anne Hathaway en una de sus últimas apariciones antes de la Milán Fashion Week
Mientras reflexionáis, os dejamos con el tráiler de lo que fue el documental Valentino: The last emperor, un homenaje a la trayectoria profesional del modisto, sin duda uno de los grandes del made in Italia.
Keep trending!

1 comentario:

  1. En general me parece bien la globalización, aunque no en todos los aspectos.
    En cuanto al "made in China", considero que no es de recibo en la mayoría de los casos: Una marca exquisita cobra por una pieza de ropa bastante, y cuando descubres que lo han hecho en China, o en Bangladesh, empiezas a pensar que te han tomado el pelo. Exactamente eso es lo que me ha pasado recientemente. Compré 2 blusas que marcaban 198 euros (las obtuve por 50 cada una), y otra que marcaba 129 por 45... pero... mirando la etiqueta, veo que esas marcas me estaban timando, porque confeccionan en China. Y en España se está destruyendo TODO el tejido empresarial. Creo que es una mala política, que nos pasará factura en un plazo no muy lejano.

    Si toda la confección va a ser así en el futuro inmediato, prefiero comprar directamente a China. Es mucho más barato

    ResponderEliminar