viernes, 24 de febrero de 2012

Harrods vs Excelsior

En esta semana en la que estamos redescubriendo Londres vs Milano, nos hemos fijado en dos grandes almacenes, uno en cada ciudad, que nos ofrecen dos experiencias de shopping bien diferentes, tanto como la personalidad de las ciudades en las que se encuentran: De Londres vs Milano pasamos a Harrods vs Excelsior.


Y como se suele decir que “la edad es un grado” empezaremos por el más veterano de los dos. Harrods es el centro comercial más famoso de Londres y una referencia en todo el mundo. Está situado en Brompton Road, en el distrito de Knightsbridge, muy cerca de Hyde Park.

Sus orígenes se remontan a 1834, cuando Charles Henry Harrod abrió una pequeña tienda de comida. En 1849 la tienda se trasladó a su localización actual donde, con el tiempo, fue ampliándose mediante la compra las tiendas y casas aledañas.

Pero el aspecto que hoy contemplamos es consecuencia de un incencio en diciembre de 1883. El edificio se derrumbó y, poco tiempo después, fue reconstruido a mayor escala. Actualmente el propietario de Harrods es el egipcio Mohamed Al Fayed.
Harrods no es solo un lugar al que ir de compras. Se ha convertido en un objetivo turístico en sí mismo, con una decoración de lujo con estatuas, fuentes y salas decoradas con diferentes motivos. Sin que falte una sala egipcia y monumentos conmemorativos de Diana de Gales.
 Si tuviéramos que resumir su espíritu en una sola frase, nada mejor que su lema: «Omnia Omnibus Ubique», «Todo para todo el mundo en todas partes». Un lema colonizador para una empresa de un país que ha dejado huella en todo el mundo. Lo mismo que Harrods con sus productos, porque …¿Quién no tiene algun objeto (bolsa, botes de te, peluches…) en su casa?
Y en Milán, desde el pasado septiembre podemos visitar los nuevos grandes almacenes de lujo, moda, belleza y comida del Gruppo Coin, el mayor retailer italiano.

El concepto de la nueva tienda es atrevido e innovador, como Milán y sus habitantes: el edificio está colocado en pleno centro de la ciudad, en la prestigiosa calle Vittorio Emanuele, el tradicional paseo donde se encuentran las principales marcas, cerca del famoso “quadrilatero della moda”.

Para ello se escogió un viejo y muy conocido cine de la ciudad, el Excelsior Milano, completamente renovado por el francés Jean Nouvel. El arquitecto ha conservado tanto la escenografía como el efecto sorpresa del cine utilizando grandes pantallas, en el interior y exterior del almacén, que recuerdan la historia y el glamour del séptimo arte, al mismo tiempo que promocionan las colecciones del momento.


¿Quién puede negar que visitar unos grandes almacenes es un plan aburrido o sin glamour? Y es que en estas dos maravillosas ciudades, todo esta a la altura de las expectativas que generan.

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3 comentarios:

  1. ¡Hola! Estuve en Milán no hace mucho y acababan de inaugurar Excelsior. Imaginaba que iba a ser enorme y no es ni del tamaño de Santa Eulalia en Barcelona. Buena planta sótano gourmet, con posibilidad de degustación de vinos. Me dio mucha rabia ver todos los aceites de oliva italianos con botella de diseño y pensar que son de origen español. Buena planta de cosmética, aunque sin echar cohetes: el Corte Inglés, Regia y Júlia les superan con creces. Se centran mucho en las marcas muy comerciales conocidas y que se publicitan. Si no recuerdo mal, hay otras dos plantas, de ropa, pero en total debía haber unas 40 prendas, diez bolsos y algunos pares de zapatos. Muy monas puestas y precio alto, pero creo que no tienen claro lo que quieren: ¿que hacían ahí unos zapatos de la segunda marca de Marc Jacobs? No queda claro a qué público quieren llegar. Bastantes piezas puestas en aparador de cristal de manera que no se pueden tocar, como si fuera un museo o un gabinete de las maravillas, pero luego lo que hay dentro no mata. En cuanto a la arquitectura, buen trabajo de Jean Nouvel al reconvertir el antiguo cine, pero ha quedado muy poco espacio útil. Las fotos hacen que parezca más grande de lo que es. La mejor experiencia fue conocer a Isabella Collalto mientras fui a lavarme las manos. Entablamos conversación distendida y me invitó a una degustación de sus vinos. Mujer empresaria que resulta ser condesa. No pude comprarlos allí porque no iba con maleta para facturar y en España no venden "por cortesía con los vinos españoles", me dijo. Probé el chardonnay y era fabuloso. Sus viñedos se pueden visitar. Están cerca de Venecia. Podéis conocer su historia en la web de Collalto. ¡Hasta pronto!
    Dolors Massot.

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  2. Muchas gracias Dolors! este comentario completa el post de forma inmejorable. Gracias por compartirlo!!!

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  3. A mí me han entrado unas ganas locas de conocerlos¡¡¡¡

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